Durante la Primera Guerra Mundial `Abdu'l-Bahá fue galardonado con la Orden del Imperio Británico, reconociendo su esfuerzo por disminuir los efectos de la hambruna que sufría Palestina por medio de la repartición de su propio almacenamiento de grano.
Existen dos causas de enfermedad: una es material, la otra espiritual. Si la enfermedad es del cuerpo, es necesario un remedio material; si es del alma, un remedio espiritual. Abdu'l-Bahá
Tratad la enfermedad preferentemente a través de la dieta, absteniéndoos del uso de fármacos; y si encontráis lo necesario en una hierba simple, no recurráis a medicamentos compuestos. Abdu'l-Bahá
La humanidad debe implicarse de lleno en este asunto, y no demorar por más tiempo la modificación de las condiciones que causan la miseria de la tiranía de la pobreza a un gran número de personas. Abdu'l-Bahá
En verdad te digo, no era una carta, sino un jardín de rosas adornado con jacintos y flores. Contenía la dulce fragancia del paraíso, y el céfiro del Amor Divino emanó de sus floridas palabras. Abdu'l-Bahá
¿Qué provecho existe en estar de acuerdo en que la amistad universal es buena, y en hablar de la solidaridad de la raza humana como un gran ideal? A menos que estos pensamientos se trasladen al mundo de la acción, serán inútiles. Abdu'l-Bahá
¡Pero la guerra se hace para satisfacer la ambición de las personas; por afán de ganancia material para unos pocos, causando una terrible miseria a innumerables hogares, destrozando los corazones de centenares de hombres y mujeres! Abdu'l-Bahá
Todo edificio se construye con muchas piedras diferentes; sin embargo, cada una depende de la otra en un grado tal que si alguna se desplazara, todo el edificio sufriría; y si alguna fuese defectuosa, la estructura sería imperfecta. Abdu'l-Bahá
Si yo os amo, no necesito hablaros de mi amor continuamente, pues sin necesidad de palabras lo comprenderéis. Por el contrario, si no os amo, también os daréis cuenta, y no me creeríais aunque os dijese que os amo con un millón de palabras. Abdu'l-Bahá
Los santos son personas que se han librado del mundo de la materia y han vencido al pecado. Viven en el mundo, pero no pertenecen a él; sus pensamientos están continuamente en el mundo del espíritu. Sus vidas transcurren en santidad, y sus acciones expresan amor, justicia y piedad. Abdu'l-Bahá