Adam Smith (Kirkcaldy, bautizado el 16 de junio de 1723-Edimburgo, 17 de julio de 1790) fue un economista y filósofo de la Ilustración escocesa, considerado uno de los mayores exponentes de la economía clásica y de la filosofía de la economía.
Este pensador escocés creía que el fundamento de la acción moral no se basa en normas ni en ideas nacionales, sino en sentimientos universales, comunes y propios de todos los seres humanos.
El verdadero precio de todas las cosas, lo que todas las cosas cuestan realmente al hombre que quiere adquirirlas es el esfuerzo y la molestia que suponen adquirirlas. Adam Smith
La humanidad es la virtud de la mujer; la generosidad, la del hombre. El bello sexo que posee mayor ternura que el nuestro, rara vez tiene tanta generosidad. Adam Smith
No es por la benevolencia del carnicero, del cervecero y del panadero que podemos contar con nuestra cena, sino por su propio interés Adam Smith
El verdadero precio de todas las cosas, lo que todas las cosas cuestan realmente al hombre que quiere adquirirlas es el esfuerzo y la molestia que supone adquirirlas Adam Smith
El hombre necesita a cada paso de la ayuda de sus semejantes, y es inútil que la espere tan sólo de su benevolencia: le será más fácil obtenerla si puede interesar en su favor el amor propio de aquellos a quienes recurre y hacerles ver que lo que les pide. Adam Smith
Fundar un gran imperio con el sólo propósito de crear un pueblo de clientes, puede a primera vista parecer únicamente un proyecto apto para una nación de tenderos. Es, sin embargo, un proyecto por completo inapto para una nación de tenderos, pero extremadamente apto para una nación que está gobernada por tenderos. Adam Smith