Marco Aurelio Antonino (en latín: Marcus Aurelius Antoninus; Roma, 26 de abril de 121-Vindobona o Sirmio, 17 de marzo de 180), conocido como Marco Aurelio, fue un emperador del Imperio romano desde el año 161 hasta el año de su muerte, en 180.
La gran obra de Marco Aurelio, Meditaciones, escrita en griego helenístico durante las campañas de la década de 170, todavía está considerada como un monumento al gobierno perfecto. Se la suele describir como "una obra escrita de manera exquisita y con infinita ternura".
Todo lo que escuchamos es una opinión, no un hecho. Todo lo que vemos es una perspectiva, no es la verdad. Marco Aurelio
No malgastes lo que te queda de vida conjeturando sobre los demás, a no ser que busques un bien común. Pues imaginar qué pueden estar haciendo y por qué, qué están pensando y qué planean, te aturde y te aparta de tu guía interior Marco Aurelio
Acuérdate en adelante, cada vez que algo te contriste, de recurrir a esta máxima: que la adversidad no es una desgracia, antes bien, el sufrirla con grandeza de ánimo es una dicha. Marco Aurelio
En ninguna parte puede hallar el hombre un retiro tan apacible y tranquilo como en la intimidad de su alma. Marco Aurelio
La felicidad de tu vida depende de la calidad de tus pensamientos: por lo tanto, Guardia en consecuencia, y cuidar de que se entretienen sin nociones inadecuadas a la virtud y el carácter razonable. Marco Aurelio
Los deseos conducen a la permanente preocupación y decepción, ya que todo lo que se desea de este mundo es miserable y corrupto. Marco Aurelio