(...) En cierto momento logré sonreír de nuevo y sentirme mejor. No solo en el corazón, sino en todo mi cuerpo. Caí en la cuenta de que me hacía bien, que tenía que seguir sonriendo. Yoko Ono
La insolencia es el escudo de la desvergüenza y la fortaleza de la cobardía Ignacio Manuel Altamirano
Reconciliar al mundo es demasiado ambicioso, pero al menos se puede formar a los niños para ser respetuosos hacia las diferencias, que son lo único que nos permite aprender: Si todos fuéramos iguales, no podríamos ofrecernos nada unos a otros. Yehudi Menuhin
Un hombre no mide su altura en los momentos de confort, sino en los de cambio y controversia. Martin Luther King
Que los estudiantes de filosofía aprendan primero lógica, después ética, a continuación física y en último lugar la naturaleza de los dioses. David Hume
Aquel que es realmente tu amigo acudirá en tu ayuda cuando la necesites: Si estas triste, llorará; si estas en vela, no podrá dormir; así, de cada pena del corazón contigo compartirá la carga. Estas son señales ciertas para distinguir al amigo fiel del enemigo adulador. William Shakespeare
¿Qué ganarías con injuriar a una piedra que es incapaz de oírte? Pues bien, imita a la piedra y no oigas las injurias que te dirijan tus enemigos. Epicteto
Mucha paz tendríamos si en los dichos y hechos ajenos que no nos pertenecen, no quisiéramos meternos Tomás de Kempis
Cuando la patria sea injusta contigo, haz como una madrastra: toma el partido del silencio. Pitágoras
Todos somos unos genios. Pero si juzgas a un pez por su habilidad de escalar un árbol, vivirá su vida entera creyendo que es estúpido. Albert Einstein
¿Qué sentido tiene permitirle acabar con mi existencia? Zenobia Camprubí Aymar