Pues primitivamente, siempre que el hombre veía que se producía un acontecimiento, creía en la existencia de una voluntad como causa de aquel, así como en la de seres que actuaban personalmente en un segundo plano. La idea de la mecánica le resultaba totalmente extraña
Friedrich Nietzsche

Frases de Friedrich Nietzsche - Pues primitivamente, siempre que el hombre veía que se producía un acontecimiento, creía en la existencia de una voluntad como causa de aquel, así como en la de seres que actuaban personalmente en un segundo plano. La idea de la mecánica le resultaba totalmente extraña

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Dirigir no significa tan sólo decidir la orientación general y las medidas políticas específicas, sino también establecer los métodos de trabajo correctos.
Mao Zedong
Recuerden, seremos nosotros los niños de hoy quienes haremos del mundo futuro un lugar mejor y más feliz
Michael Jackson
Es criminal quien sonríe al crimen; quien lo ve y no lo ataca; quien se sienta a su mesa; quien se sienta a la mesa de los que se codean con él o le sacan el sombrero interesado; quienes reciben de él el permiso de vivir.
José Martí
Eso no se le ocurre ni al que asó la manteca
José María García
Pero todos los buenos pasos alegres y felices de aquella época de mi vida fueron dados sin reflexionar. Posiblemente el reino de la libertad sea también el reino de las equivocaciones.
Hermann Hesse
El enojo, el orgullo y la competencia son nuestros verdaderos enemigos
Dalai Lama
Todos los hombres son iguales. La diferencia entre ellos no está en su nacimiento, sino en su virtud
Voltaire
El día que leí que el alcohol era malo para la salud, dejé de leer.
Jim Morrison
Oro, plata, joyas..., tierra, montones de estiércol. —Goces, placeres sensuales, satisfacción de apetitos..., como una bestia, como un mulo, como un cerdo, como un gallo, como un toro. Honores, distinciones, títulos..., cosas de aire, hinchazones de soberbia, mentiras, nada.
Josemaría Escrivá de Balaguer
Jamás en la vida encontraréis ternura mejor y más desinteresada que la de vuestra madre.
Honoré de Balzac