Los seres humanos no están condenados, por su constitución biológica, a aniquilarse o a estar a la merced de un destino cruel, infligido por ellos mismos Albert Einstein
No hablaré de Diego como de mi esposo porque sería ridículo. Diego no ha sido jamás ni será esposo de nadie. Tampoco como de un amante, porque él abarca mucho más allá de las limitaciones sexuales, y si hablara de él como de mi hijo, no haría sino describir o pintar mi propia emoción, casi mi autorretrato y no el de Diego. Frida Kahlo
El hombre de honor no tiene más patria que aquella en que se protegen los derechos de los ciudadanos y se respeta el carácter sagrado de la humanidad Simón Bolívar
No necesito amigos que cambien cuando yo cambio y asientan cuando yo asiento. Mi sombra lo hace mucho mejor. Plutarco
Yo mismo me respondo, no la otra persona. La otra persona queda inafectada Horst Matthai Quelle
¡Mire si sabré estas cosas que yo me casé con tres! Anónimo
Entre el yin y el yang, me quedo con el yen. Roberto Fontanarrosa
Feliz aquel que fue joven en su juventud, feliz aquel que supo madurar a tiempo. Edmund Burke
Si leo a Maquiavelo, mi enemistad con el poder se adormece. Pero se trata de un sueño ligero, del cual siempre despierto a gusto. Elias Canetti
Un hombre tiene muchas vías de salvación, y como último remedio la tumba. Ugo Foscolo
La gente no quiere trabajar, la gente quiere vivir bien, pero sin trabajar. Charles Bukowski