La verdadera locura quizá no sea otra cosa que la sabiduría misma que, cansada de descubrir las vergüenzas del mundo, ha tomado la inteligente resolución de volverse loca.
Heinrich Heine

Frases de Heinrich Heine - La verdadera locura quizá no sea otra cosa que la sabiduría misma que, cansada de descubrir las vergüenzas del mundo, ha tomado la inteligente resolución de volverse loca.

Más Frases


Las mujeres parecen primero ángeles, luego supone uno si serán demonios, y poco a poco empieza uno a comprender, que son hembras, como las yeguas, como las vacas...
Pío Baroja
Quisiera pedir a todos los que ocupan puestos de responsabilidad en el ámbito económico, político o social, a todos los hombres y mujeres de buena voluntad: seamos custodios de la creación
Papa Francisco
Por eso la amas. Le temes porque es más fuerte que tú, la odias porque le temes. La amas porque no puedes dominarla. Puesto que solamente cabe amar lo indomable.
Yevgueni Zamiatin
El sueño es la aurora boreal del pensamiento
Ignacio Manuel Altamirano
La compasión es la raíz de todas las formas de veneración.
Dalai Lama
Yo no estoy borracho pero... ¿que hace el techo en el suelo?
Groucho Marx
Soy un raro. No puedo soportar al ser humano en su estado actual, he de ser engañado. Los psiquiatras deben tener un término para designar eso, yo también lo tengo para los psiquiatras.
Charles Bukowski
El fuego le lamió y le inundó y notó que se le marchitaban los delicados tejidos del cerebro. Trató de enfocar su pensamiento en el hielo. Se asió al hielo en busca de salvación, a pedazos de hielo, a montañas de hielo, a icebergs de hielo semihundidos en agua helada. Aunque su alma ardía, pensaba en el hielo.
Harlan Ellison
Los grandes caminos de la lucha por la felicidad o de la defensa contra el sufrimiento son presentados con sus particularidades psicológicas.
Theodor Reik
El Ser humano que promete todo es seguro que no hará nada y cada uno que prometa demasiado se encuentra en peligro de utilizar medios diabólicos para llevar a cabo sus promesas y está ya en el camino de la perdición.
Carl Gustav Jung