Los hombres tienen el espíritu limitado por muchas preocupaciones, mientras que las mujeres, aunque ignorantes, son generalmente vivarachas y graciosas. Pero unos y otras se hallan animados de deseos, de pasiones, tan vivas como el aire que respiran, tan ardientes como el sol que ilumina aquellas regiones.
Giacomo Casanova

Frases de Giacomo Casanova  - Los hombres tienen el espíritu limitado por muchas preocupaciones, mientras que las mujeres, aunque ignorantes, son generalmente vivarachas y graciosas. Pero unos y otras se hallan animados de deseos, de pasiones, tan vivas como el aire que respiran, tan ardientes como el sol que ilumina aquellas regiones.

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Dios, en cambio, por ser la primera causa de todas las cosas y causa también de sí mismo, se hace conocer a sí mismo por sí mismo.
Baruch Spinoza
Cuando dos personas están bajo la influencia de la más violenta, la más insana, la más ilusoria y la más fugaz de las pasiones, se les pide que juren que seguirán continuamente en esa condición excitada, anormal y agotadora hasta que la muerte los separe.
George Bernard Shaw
Por Dios entiendo un ser absolutamente infinito, esto es, una substancia que consta de infinitos atributos, cada uno de los cuales expresa una esencia eterna e infinita.
Baruch Spinoza
Todo tiempo pasado fue anterior.
Les Luthiers
En nuestro planeta sólo podemos amar sufriendo y a través del dolor. No sabemos amar de otro modo ni conocemos otra clase de amor.
Fiódor Dostoyevski
No estoy de acuerdo con los seguidores de Marx y los de Adam Smith: la razón por la que los mercados libres funcionan es porque dejan que la gente tenga suerte, gracias al agresivo método del ensayo y error, y no dan a las personas recompensas ni incentivos por su destreza
Nassim Taleb
La justicia es el conjunto de las normas que perpetúan un tipo humano en una civilización.
Antoine de Saint-Exupéry
Dentro de veinte años, estarás más decepcionado por lo que no hiciste que por lo que hiciste
Mark Twain
La patria, posiblemente, es como la familia, sólo sentimos su valor cuando la perdemos.
Gustave Flaubert
Comprendo mi destino –se dijo al fin con tristeza-. ¡Muy bien¡!Estoy preparado¡ Acaba de comenzar mi soledad última.
Friedrich Nietzsche