Los ojos de mi hijo, sus ojos que ayer eran flores abiertas, capullos de noche, y hoy son rendijas tristes, sesgadas por el cansancio y el recelo. Francisco Umbral
El miedo es el más ignorante, el más injurioso y el más cruel de los consejeros. Edmund Burke
Yo sigo luchando, yo lucho para ganar Margaret Thatcher
No quiero ni siquiera saber si antes de mí hubo otro hombre René Descartes
Si no te quieren como tú quieres que te quieran, ¿qué importa que te quieran?. Amado Nervo
La verdadera riqueza de un hombre está en la bondad que hace en el mundo Mahoma
He aquí Dios, más fuerte que yo, que viniendo me dominará Dante Alighieri
Nada me había entristecido tanto en los agitados años de mi juventud como la idea de haber nacido en una época que parecía erigir sus templos de gloria exclusivamente para comerciantes y funcionarios Adolf Hitler
La soledad no se encuentra, se hace. La soledad se hace sola. Yo la hice. Porque decidí que era allí done debía estar sola, donde estaría sola para escribir libros. Marguerite Duras
Los niños de verdad no van dando saltitos a menos que hayan tomado drogas. Terry Pratchett
Mandando mal se pierde la autoridad del mando Publilio Siro