El buen Dios, previendo en su sabiduría que su pueblo elegido sería disperso por el mundo entero, dio a todos sus miembros un olor especial que les permitiese reconocerse y encontrarse en todas partes: es el faetus judaicus Arthur Schopenhauer
El diablo es optimista si cree que puede hacer peores a los hombres. Karl Kraus
Confiemos siempre en el poder de la misericordia de Dios. Todos somos pecadores, pero su gracia transforma y renueva nuestra vida. Benedicto XVI
La sociedad no son los hombres, sino la unión de los hombres Montesquieu
Por regla general la propaganda opera siempre a partir de un sustrato preexistente, ya sea una mitología nacional o un complejo de odios y prejuicios tradicionales; se trata de difundir argumentos que puedan arraigar en actitudes primitivas. Joseph Goebbels
El amor mueve; el temor retrae Ramón Llull
No se llega a gran hombre si no se tiene el coraje de ignorar una infinidad de cosas inútiles. Carlo Dossi
Todos los libros pueden dividirse en dos clases: libros del momento y libros de todo momento. John Ruskin
Para encontrar gusto a la vida no hay nada como morirse. Enrique Jardiel Poncela
La palabra sincera huye, como niña decorosa, de los comedores renales. José Martí
Nunca hay que decir 'no me toca', sino '¡Voy yo!'. Juan Bosco