La historia es un puro engaño; permanece tal como la maquilló y amañó algún gran escritor. Aun si halláramos unas Memorias que demostraran hasta la evidencia que Tácito sólo escribió imposturas al contar las virtudes de Agrícola y los vicios de Tiberio, Agrícola y Tiberio seguirían siendo tal como los hizo Tácito. François-René de Chateaubriand
Dublín es como todo, sólo un pretexto más de la existencia, lo diré de otro modo, que vivir es la ciencia de no saber de nada y a conciencia. El amor, por su parte, puede encontrarnos en cualquier postura, quizá el amor es arte de mestiza blancura. Me gusta que el amor no tenga cura. Beatriz Villacañas