Si me preguntas porqué he preferido la Orden de Predicadores, responderé que es la más conforme a mi naturaleza, a mi inteligencia y a mi fin; a mi naturaleza, por su gobierno; a mi inteligencia, por sus doctrinas; a mi fin, por sus medios de acción que son principalmente la predicación y la ciencia sagrada. Henri Lacordaire
Los cuentos de hadas se equivocaban. El príncipe no despertaba a la princesa con un beso, sino con una promesa. En sus brazos ella estaría a salvo para siempre. Ella despertaba para vivir feliz para siempre jamás. Si no lo hubiera sabido, la princesa habría preferido dormir para siempre. Orson Scott Card