Tus amargos momentos tienen tiempo para convertirse en dulces recuerdos
Alexandre Dumas

Frases de Alexandre Dumas - Tus amargos momentos tienen tiempo para convertirse en dulces recuerdos

Más Frases


En la infancia, en la adolescencia, en la juventud, es cuando se forma la personalidad y cuando se impregna uno de lo que tiene entorno, por eso, yo estoy por dentro lleno de Valladolid.
Francisco Umbral
La hipocresía es un homenaje que el vicio rinde a la virtud.
François de La Rochefoucauld
No todo lo que parece es, no todo lo que es parece. Pero entre el ser y el parecer hay siempre un punto de entendimiento, como si ser y parecer fuesen dos planos inclinados que convergen y se unen. Hay un declive, la posibilidad de escurrir por él, y, si así sucede, se llega al punto en que, al mismo tiempo, se contacta con el ser y el parecer.
José Saramago
La única libertad que me importa es la libertad de hacer lo correcto, de la libertad para hacer el mal estoy dispuesto a desprenderme de la manera más fácil con cualquier persona que venga a quitármela
Thomas Henry Huxley
Lo extraordinario del virus del tifus, como del resto de los virus, es su increíble insignificancia; los ojos no pueden verlo, pero él puede detener el curso de la vida, decidir el destino del hombre, y hacer pedazos, si lo desea, una familia.
Naguib Mahfuz
Cuando el trabajo es un placer, la vida es una alegría! Cuando el trabajo es un deber, la vida es una esclavitud
Maximilien Robespierre
En general, se llega a los negocios por lo que se tiene de mediocre, y se permanece en ellos por lo que se tiene de superior. Esta unión de elementos antagónicos es la cosa más inusual, y por ello hay tan pocos estadistas.
François-René de Chateaubriand
El que puede gobernar a una mujer, puede gobernar a una nación
Honoré de Balzac
Es vulgarísima verdad que, en grado variable, el afán de aprobación y aplauso mueve a todos los hombres...
Santiago Ramón y Cajal
El suicidio sólo debe mirarse como una debilidad del hombre, porque indudablemente es más fácil morir que soportar sin tregua una vida llena de amarguras.
Goethe