Yalāl ad-Dīn Muhammad Rūmī (en persa: جلالالدین محمد رومی), también conocido como Yalāl al-Dīn Muḥammad Baljī (جلالالدین محمد بلخى), Mevlânâ/Mawlānā (persa: مولانا, lit.
Luego de su muerte, sus seguidores fundaron la orden sufí Mevleví, mejor conocidos como los "Derviches Giróvagos", ya que realizan una meditación en movimiento llamada "semá" donde hombres (y actualmente, mujeres) giran sobre si mismos acompañados por flautas y tambores.
Esto es amar: volar hacia un cielo secreto, causar que cien velos caigan cada momento. Primero dejar ir la vida. Finalmente dar un paso sin pies. Yalal ad-Din Muhammad Rumi
No pruebes una mirada sobre mi dorado rostro, porque tengo piernas de hierro. Yalal ad-Din Muhammad Rumi
¿Por qué debo buscarlo? Soy el mismo, soy como él. Su esencia habla a través de mí. ¡Me he estado buscando! Yalal ad-Din Muhammad Rumi
¡Cuántas lluvias de largueza han caído para que el mar distribuyera perlas! ¡Cuántos soles de generosidad han brillado para que las nubes y el mar aprendieran a ser tan espléndidos! Yalal ad-Din Muhammad Rumi
El movimiento de las olas, día y noche, viene del mar, tú ves las olas, pero, ¡qué extraño! no ves el mar. Yalal ad-Din Muhammad Rumi
Aunque los caminos de la búsqueda son numerosos, la búsqueda es siempre la misma. Yalal ad-Din Muhammad Rumi
Toda una vida sin amor no cuenta, el amor es el agua de vida, ¡Bébela con el alma y el corazón! Yalal ad-Din Muhammad Rumi
El templo del amor, no es el amor en sí. El verdadero amor es el tesoro, no las paredes a su alrededor. Yalal ad-Din Muhammad Rumi
Tú eres una sombra: ¡aniquílate en los rayos del Sol! ¿Cuánto tiempo seguirás contemplando tu sombra? ¡Contempla también Su luz! Yalal ad-Din Muhammad Rumi