Yalāl ad-Dīn Muhammad Rūmī (en persa: جلالالدین محمد رومی), también conocido como Yalāl al-Dīn Muḥammad Baljī (جلالالدین محمد بلخى), Mevlânâ/Mawlānā (persa: مولانا, lit.
Luego de su muerte, sus seguidores fundaron la orden sufí Mevleví, mejor conocidos como los "Derviches Giróvagos", ya que realizan una meditación en movimiento llamada "semá" donde hombres (y actualmente, mujeres) giran sobre si mismos acompañados por flautas y tambores.
¿Qué es lo que realmente posees y lo que has adquirido en esta vida? ¿Qué perlas has sacado de las profundidades del mar? En el día de tu muerte tus sentidos físicos desaparecerán. ¿Tienes la luz espiritual que ilumine tu corazón? Cuando en la tumba tus ojos se llenen de polvo ¿brillará tu sepultura intensamente? Yalal ad-Din Muhammad Rumi
Más allá de las ideas de actuar bien y actuar mal, se extiende un campo. Allí nos encontraremos. Yalal ad-Din Muhammad Rumi
Cuando el oído es penetrante, se convierte en ojo. De lo contrario, la palabra de Dios se enreda en el oído y no llega al corazón. Yalal ad-Din Muhammad Rumi
El amor es el calor de la luz del Ser. Por eso el amor lo abarca todo. El amor es el calor y el resplandor de la Unidad. El amor es la esencia de la Unidad. Yalal ad-Din Muhammad Rumi
Has sufrido tormentos pero aún así sigues estando lejos de Dios, porque no has alcanzado tu objetivo de destruir al yo. Tus tormentos no cesarán hasta que perezcas. No puedes llegar al tejado a no ser que asciendas por la escalera. Si faltan dos travesaños no podrás subir por ella, si la cuerda del pozo es demasiado corta el cubo no llegará al agua. Yalal ad-Din Muhammad Rumi
La belleza del corazón es la belleza duradera: sus labios brindan el agua de vida para beber. Yalal ad-Din Muhammad Rumi